Descubre una ciudad encantadora, hogar de castillos y jardines que componen un paisaje de elegancia y refinamiento en el Valle de Loira.

Este emblemático castillo se alza majestuosamente sobre el río Loira, en una pequeña ciudad del valle del mismo nombre. Conocido por su arquitectura renacentista, este sitio histórico fue una residencia real durante el Renacimiento. Fue aquí donde grandes personajes de la historia, como Leonardo da Vinci, fueron invitados por el rey Francisco I, marcando un período de florecimiento cultural y artístico. El castillo es también famoso por su capilla, la Saint-Hubert, donde se dice que descansan los restos de Da Vinci. La elegancia de sus torres y sus ornamentadas fachadas reflejan el poder y la influencia de la monarquía francesa de la época. Además, sus jardines ofrecen una vista panorámica del paisaje circundante, lo que lo convierte en un lugar de gran belleza natural y arquitectónica. A lo largo de los siglos, este lugar ha sido testigo de eventos significativos, incluyendo conspiraciones y encuentros diplomáticos. Durante la época de la Liga Católica, fue escenario de un oscuro episodio conocido como la Conspiración de los Poudres. La rica historia del castillo se refleja en cada una de sus salas y pasillos, donde los visitantes pueden sumergirse en las historias de aquellos que una vez caminaron por sus estancias.